Lo primero de lo que me he dado cuenta al buscar mi nombre
en Google es que la mayoría de los links que aparecen son de referencias a
redes sociales, tanto más antiguas como más nuevas. MySpace, Netlog, Facebook o
Twitter son los principales reclamos que la red ofrece a la hora de buscar mi
propio nombre, pero lo más sorprendente es que la primera referencia que surge
es un enlace a la página web sobre publicidad La historia de la publicidad gracias
a una biografía que realicé para la página el año pasado sobre el publicista
estadounidense William Burnet Benton.
A la hora de establecer como me gustaría aparecer en la red
y tras evaluar como aparezco, la realidad es que las referencias de redes
sociales mundialmente activas como Facebook o Twitter pueden ayudarme a generar
una mejor reputación online aunque para ello debería de tener muchos seguidores
y un perfil de Facebook muy activo en el que interactuaran muchas personas,
básicamente como un blog, que sería una de las grandes opciones a la hora de
fabricar una reputación online sostenible, así como con páginas web sobre
nosotros y nuestros trabajos. Este
podría ser un camino bastante asequible para generar contenido sobre nosotros y
nuestro perfil profesional para que, si en algún momento en alguna empresa
deciden saber algo sobre nosotros de manera independiente, puedan aparecer
datos más allá de las típicas referencias de existencia a redes sociales con
las que cuentan el gran número de personas.
Por otro lado, que el primer enlace que aparezca sea la
biografía que realicé para La historia de
la publicidad es un hecho que puede generar un punto a favor dentro de mi
reputación online ya que consta como un trabajo realizado para una web
importante dentro del ámbito nacional.
Por último, pensando en la manera en que me gustaría que
aparecieran mis referencias en la web, como ya he comentado antes, crear un
espacio en el que aparezcan nuestras preferencias, estudios, y sobre todo,
trabajos y proyectos realizados por nosotros, se hayan llevado a cabo o no. Una
especie de mezcla entre un portfolio y un currículum 2.0 teniendo en cuenta,
como afirma Juan Martínez de Salinas, que “Para empezar, os recomiendo ser
fieles a vuestro estilo, es decir, debéis ser vosotros mismos y no interpretar
papeles o roles que no sois. De la misma forma, se debe asumir que caer bien o
gustar a todo el mundo es imposible”
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